Editorial Planeta
Doceava Edición, Barcelona 2002
Tapa dura con sobrecubierta
576 págs.
ISBN 84-08-04364-1
DL. B 43322-2002
Dedicatoria
Para Joan Ramón Planas
que merecía algo mejor
El cementerio de los libros olvidados
Todavía recuerdo aquel amanecer en que mi padre me llevó por primera vez a visitar el Cementerio de los Libros Olvidados. Desgranaban los primeros días del verano de 1945 y caminábamos por las calles de una Barcelona atrapada bajo cielos de ceniza y un sol de vapor que se derramaba sobre la Rambla de Santa Mónica en una guirnalda de cobre líquido.
Enlaces
- http://www.carlosruizzafon.com/es/la-sombra-del-viento/index.php
- https://es.wikipedia.org/wiki/La_sombra_del_viento
- http://www.lecturalia.com/libro/23/la-sombra-del-viento
- https://www.planetadelibros.com/libro-la-sombra-del-viento/38840
Mis subrayados
... porque en esta vida lo único que sienta cátedra es el prejuicio.
-El hombre, como buen simio, es animal sociable en él priva el amiguismo, el nepotismo, el chanchullo y el comadreo como pauta intrínseca de conducta ética- argumentaba- es pura biología.
-El servicio militar sólo sirve para descubrir el porcentaje de cafres que cotiza en el censo -opinaba él-. Y eso se descubre en las dos primeras semanas, no hacen falta dos años. Ejército, matrimonio, Iglesia y banca: los cuatro jinetes del Apocalipsis.
Este mundo no se morirá de una bomba atómica como dicen los diarios, se morirá de risa, de banalidad, haciendo un chiste de todo, y además un chiste malo.
Se desplomó la tarde casa traición, con un aliento frío y un manto púrpura que resbalaba entre los resquicios de las calles.
... pero a veces una se siente más libre de hablarle a un extraño que a la gente que conoce- ¿Por qué será?
Me encogí de hombros.
-Probablemente porque un extraño nos ve como somos, no como quiere creer que somos.
De libros malditos, del hombre que los escribió, de un personaje que se escapó de las páginas de una novela para quemarla, de una traición y de una amistad perdida, Es una historia de amor, de odio y de los sueños que viven en la sombra del viento.
Hay pocas razones para decir la verdad, pero para mentir el número es infinito.
El dinero es como cualquier otro virus: una vez que pudre el alma del que lo alberga, parte en busca de sangre fresca.
El destino suele estar a la vuelta de la esquina. Como si fuese un chorizo, una furcia o un vendedor de lotería: sus tres encarnaciones más socorridas. Pero lo que no hace son visitas a domicilio. Hay que ir a por el.
Encerraba sus sentimientos en el calabozo de su alma durante meses hasta que se emponzoñaban sin remedio.
En aquellos días aprendí que nada da más miedo que un héroe que vive para contarlo, para contar que todos los que cayeron a su lado no podrán contar jamás. las semanas que siguieron a la caída de Barcelona fueron indescriptibles. se derramó tanta o más sangre durante aquellos días que durante los combates, sólo que en secreto y a hurtadillas. Cuando finalmente llegó la paz, olía a esa paz que embruja las prisiones y los cementerios, una mortaja de silencio y vergüenza que se pudre sobre el alma y que nunca se va. No había manos inocentes ni miradas blancas. Los que estuvimos allí, todos sin excepción, nos llevaremos el secreto hasta la muerte.
El tiempo pasa más aprisa cuanto más vacío está. Las vidas sin significado pasan de largo como trenes que no paran en tu estación.